La Libertad Avanza y el PRO oficializaron su alianza electoral en la Ciudad de Buenos Aires, pero lo que podría haber sido un gesto de unidad terminó revelando una sociedad desequilibrada. Mientras Karina Milei exige apoyo absoluto del macrismo en el Congreso Nacional, no ofrece lo mismo a cambio en la Legislatura porteña para apuntalar al jefe de Gobierno, Jorge Macri.     El acuerdo, anunciado a través de un escueto comunicado sin firmas ni foto de familia, estipula que “ambos partidos trabajarán en conjunto hasta 2027 para consolidar la agenda de reformas del presidente Javier Milei”. Sin embargo, el texto no compromete a los legisladores libertarios a respaldar los proyectos del oficialismo porteño, lo que deja a Jorge Macri con más dudas que certezas. Según trascendió, los libertarios aceptaron “bajar el tono confrontativo” en la Legislatura, pero dejaron en claro que no votarán todo lo que se les pida. “Vamos a acompañar lo que creamos que hay que acompañar y lo que no, no lo votaremos”, aseguró un operador libertario. La frase resume el espíritu de un entendimiento que parece más una imposición que una alianza real. Del otro lado, el PRO deberá entregar lugares en la lista de Diputados nacionales por CABA. Se barajan nombres como Fernando De Andreis, Darío Nieto y Hernán Iglesias Illa para puestos secundarios, con la esperanza de infiltrar “macristas puros” que puedan condicionar a Milei en el Congreso tras diciembre. Pero las resistencias internas son fuertes: Karina Milei se niega a habilitar candidaturas como la de Jimena La Torre, actual consejera de la Magistratura, y pretende intercalar cuidadosamente los géneros para mantener el control. La negociación final se cerró el martes por la noche en Roldán, entre vino y mollejas, sin la presencia de las figuras principales. Mauricio Macri evitó la tan buscada foto con Karina en la sede del Gobierno porteño, lo que retrasó el anuncio del pacto hasta último momento. La ausencia de esa imagen es un símbolo de lo que realmente ocurre: una desconfianza mutua disfrazada de acuerdo político. Mientras el oficialismo libertario busca asegurarse el respaldo legislativo nacional para avanzar con su ajuste, no está dispuesto a devolver favores en los distritos donde otros deben gobernar. Jorge Macri, que necesita votos en la Legislatura para gestionar, quedó colgado de un acuerdo que lo compromete pero no lo respalda. Karina Milei, en nombre de su hermano presidente, exige lealtad ciega sin ofrecer reciprocidad. Así, la alianza con el PRO en CABA deja más dudas que certezas, y expone que el verdadero objetivo libertario no es la coalición, sino el control total del Congreso, aún a costa de sus propios “socios”. ¿Alianza o sometimiento? En la Ciudad, el macrismo parece haber firmado un pacto donde da todo y recibe migajas. Y en la Argentina de Javier Milei, las fotos escasean… pero las imposiciones abundan.       Canal WhatsApp: https://whatsapp.com/channel/0029VbBqLhV4tRroiQaqOB0M Y en nuestra: Red X (EX Twitter): https://x.com/El_Pulso_P