Gustavo Sáenz encendió la pantalla con una frase directa: “Que los funcionarios nacionales se den un baño de pueblo y humildad”. El gobernador salteño abrió fuego señalando que la política no puede perder el vínculo con la gente, y exigió sensibilidad para “complementar el equilibrio fiscal con humanidad” en medio del ajuste.   "Qué triste que tengamos que estar discutiendo colores. Bueno, a esto nos ha llevado el kirchnerismo también. A que los partidos políticos no existan", reprochó y también incluyó al PRO, del cual, dijo, "también ha tenido su parte". Y agregó, al respecto, que el partido amarillo "se ha encargado de destruir al radicalismo; el kirchnerismo al peronismo, y bueno, ahora La Libertad va por el PRO".   Siguiendo esa línea, Sáenz criticó duramente la superficialidad del elector moderno: “Hoy se votan colores y no partidos”, lanzó, como si en lugar de expresar una opción política, se tratara de elegir equipos deportivos. Una frase que resume círculos de política que priorizan la estética, no la sustancia.     El gobernador también defendió el respaldo de los legisladores provinciales al financiamiento del Hospital Garrahan. Lo calificó como un “emblema nacional” y recordó que votar por salud pública es apostar por el país, no por una plataforma política.     El mensaje llega en un momento en que el oficialismo lleva adelante una campaña centrada en números y etiquetado partidario, más que en políticas concretas. Sáenz apuesta a una retórica distinta: recuperar el valor del compromiso territorial y reivindicar el voto consciente, más allá del logo o la paleta de colores.           Canal WhatsApp: https://whatsapp.com/channel/0029VbBqLhV4tRroiQaqOB0M Y en nuestra: Red X (EX Twitter): https://x.com/El_Pulso_P