Empresas y mercados

La jugada financiera de Iguacel: arma un carry trade en dólares con los pozos de YPF

El ex funcionario de Macri monta una operación millonaria en Chubut que mezcla deuda en moneda dura y activos petroleros cedidos por la petrolera estatal. Alarma en el mercado por el nivel de exposición y la ingeniería de riesgo.

  • 23/06/2025 • 10:01

Javier Iguacel volvió al centro de la escena con una apuesta financiera de alto voltaje: según reveló El Pulso Político, el actual empresario del sector energético está montando un carry trade en dólares sobre los pozos de petróleo que le cedió YPF en Chubut, en una operación que despierta murmullos de alerta en la City y en despachos oficiales.

El mecanismo consiste en tomar deuda en moneda dura –más barata que en pesos por la caída de las tasas internacionales– contra la futura producción de los pozos marginales de YPF que pasaron a sus manos. Es decir: emitir deuda garantizada con petróleo que todavía no se extrajo, apostando a que los precios internacionales se mantendrán firmes y que la producción esperada efectivamente se concrete.

Fuentes del mercado advierten que la jugada es de altísimo riesgo: un derrumbe del precio del crudo o cualquier retraso en la producción puede dejar la deuda sin respaldo real, con un fuerte impacto financiero no solo para Iguacel, sino para la cadena de proveedores y bancos involucrados. "Esto es un carry trade clásico: te endeudás barato en dólares esperando que los activos rindan más que la tasa de la deuda. Pero si falla, explota", explican desde una calificadora de riesgo.

El punto que genera mayor inquietud es el rol de YPF: la petrolera estatal cedió estos activos marginales como parte de su política de desinversión en pozos de baja productividad. Sin embargo, en la práctica esos activos están siendo usados como garantía de financiamiento externo, lo que pone a prueba el criterio de traspaso de la empresa controlada por el Estado.

En Chubut y en ámbitos gremiales ya hay ruido: "Si Iguacel no cumple con los planes de inversión o entra en problemas financieros, las consecuencias las va a pagar la provincia y los trabajadores", se quejan desde el sindicato petrolero local. No es casual: la provincia depende en gran parte de las regalías de esos yacimientos.

El ex ministro de Energía de Macri asegura que el esquema es sustentable y que sus proyecciones de producción están avaladas por estudios técnicos. Pero en los pasillos de YPF algunos directores advierten que se habilitó un negocio que puede salir mal, con potenciales coletazos judiciales o mediáticos si la operación fracasa.

El mercado sigue de cerca el caso: si la maniobra funciona, Iguacel puede convertirse en el nuevo "jugador estrella" del oil & gas post Vaca Muerta; si falla, puede convertirse en un caso testigo de cómo las desinversiones de YPF derivan en riesgos sistémicos para el sector energético argentino.

Por ahora, en la Casa Rosada no opinan. Pero varios funcionarios admiten que la operación “huele a los años de las financieras petroleras de los 90”. Y nadie olvida cómo terminó esa historia.