Política y economía global

Mercosur en llamas: Milei organiza su cumbre final y tensa el bloque ante Lula y compañía

Javier Milei se apresta a recibir a los presidentes de Brasil, Uruguay, Paraguay y Bolivia en Buenos Aires, en su última cumbre presidencial como cabeza del Mercosur. En medio de roces diplomáticos, la agenda apunta a flexibilizar el bloque comercial y avanzar con acuerdos con la UE y EEUU. ¿Hasta dónde llegará el choque entre su pulso liberista y la postura de Lula?

  • 30/06/2025 • 08:23

                                Milei será el anfitrión de

 

Javier Milei juega su última carta como presidente pro tempore del Mercosur: este jueves y viernes 2 y 3 de julio, recibirá en Buenos Aires a Jair Lula Da Silva, Yamandú Orsi, Santiago Peña y Luis Arce. Será su última aparición como líder del bloque, y la tensión se palpa en el aire: Brasil busca imponer condiciones ambientales y de derechos humanos, mientras Argentina presiona por aranceles diferenciados que le permitan avanzar con el tratado con la Unión Europea.

Desde su arribo al poder, Milei definió al Mercosur como una “prisión comercial para Argentina” y exigió reformas profundas, adviertiendo que podría abandonar el bloque si no se flexibiliza. En estos seis meses al frente del bloque, rechazó inauguraciones, evitó la cumbre de Pueblo a Pueblo e impulsó intensamente la negociación con Europa; sin embargo, el acuerdo aún no se firmó.

Con Lula, el clima es tenso. Argentina espera que el brasileño acepte alivios arancelarios para exportar más a la UE y a Estados Unidos, mientras Brasil insiste en reforzar su agenda ambiental, de derechos humanos e integración sostenible. El pulso se achica: Milei quiere un bloque ágil, sin trabas; Lula empuja una estructura fuerte y socialmente responsable.

El Palacio San Martín se vestirá de gala y tensión. Será una cumbre inusual donde los espectadores no se medirán en discursitos decorativos, sino en gestos concretos: la presencia o ausencia de Lula, la firma o no del acuerdo con la UE, y el camino abierto a la negociación con Estados Unidos. Para Milei, una flexibilización exitosa sería su tabla de salvación internacional; para Lula, un giro peligroso hacia el liberalismo.

Lo que se juegue en Buenos Aires va mucho más allá de lo simbólico: puede determinar si Argentina sigue en el sendero liberal o busca un equilibrio regional. Tras el traspaso de mando del bloque a Brasil, Milei se despide con una cumbre que puede cambiar el perfil del Mercosur por años. O dejarlo como una caja vacía.